Esta semana decidimos dedicársela al cantante y compositor puertorriqueño David Sánchez Badillo, conocido por su seudónimo musical como Tempo. Joven, 35 años de edad es oriundo de Ponce y se le reconoce por el fuerte y original contenido de sus letras. Sus ataques van desde amenazas de muerte a superintentes de la policia colonial de Puerto Rico, como al propio presidente de los Estados Unidos. Pocos saben que la figura (performance) de TEMPO inspiró en alguna medida el concepto que hoy ha evolucionando hasta convertirse en GÁNSTER PR. Tempo es un símbolo indiscutible del bajo mundo y es representativo de lo que se conoce en la calle como una persona línea. Sus actuaciones, a nivel personal y récord de vida lo colocan en el equivalente en Puerto Rico a lo que en los sectores sureños de los Estados Unidos denominan como un OG (original gangster). Un guerrero de la calle que ha sobrevivido a las inclemencias histórico-culturales de crecer rodeado de la Cultura de los Gánsteres.
Fue acusado por la distribución de 30 kilos de heroina que posiblemente provenian de los terrenos invadidos por los norteamericanos en Afganistan que posteriortemente lo acusaron ironicamente por este delito. Pero, no queremos entrar
en los méritos de este asunto, por entender que no tenemos los elementos de
juicio necesarios para emitir una opinión al respecto, ya que no hemos visto el
desfile de la prueba ni conocemos los pormenores del caso. La realidad es que TEMPO
ha vuelto a la calle, esta vez más maduro y con hambre de fama que espero logre
en los meses o años subsiguientes, todo es cuestión de tiempo.
En
cuanto al tema de la distribución de drogas no hay que ser un genio para saber
como se lucran las matrices farmacéuticas estadounidenses con las adicciones de
los consumidores coloniales. Existen dos
tipos de distribuidores, en primer lugar las droguerías (farmacias) distribuyen
cientos de narcóticos a tutiplén, bajo la excusa de una receta médica y los
marginados de la calle. La realidad actual es que la mitad de las drogas que se
venden en los puntos, se pueden encontrar en la farmacia. Ambos grupos de
comerciantes se enriquecen a cuestas de los vicios de los consumidores de
drogas como Percocet, Xanax entre tantos otros derivados de los opiáceos. Es
sabido que los puntos se están enriqueciendo en la actualidad con este tipo de “medicamento”,
pero ganancia mayor se remite a las matrices norteamericanas. El “boom” de las
perco, por las cuales acusan a miles de jóvenes en Puerto Rico por el delito de
distribución de narcóticos, jóvenes que no hacen más que revender un derivado
de la heroína legalizado para unos e ilegalizado para otros. Pero sigue siendo heroína,
ya sea en la venta legal o ilegal. En resumidas cuentas Tempo fue preso por
vender y distribuir un producto, considerado ilegal. Para efectos de este análisis
TEMPO era un mero comerciante que se ganaba la vida de la forma que aprendió en
su realidad circundante o al menos de eso se le acusó.
Pero
nuestro reconocimiento no va dirigido a sus dotes como comerciante sino como
escritor, por el don de la palabra que posee y ha demostrado a lo largo de su
carrera tanto en la libre comunidad como confinado. Sus valientes ataques al
Estado, los colonizadores representados en la figura de los federales, la defensa de figuras como don Pedro Albizus Campos, Filiberto Ojeda Rios, Eugenio Maria de Hostos entre otros son perceptibles
en muchas de sus canciones. Y por esta cualidad, valor y ejemplo es que le
dedicamos la semana a David Sánchez Badillo. Con esto no pretendo defender el
empleo de David en el bajo mundo sino más bien presentarlo como una
consecuencia de su condición de pobreza, del descuido del Estado hacia este
sector social al que pertenecía, que ha quedado en una marginación marcada
desde que fueron sacados de los campos por desarrollismo muñocista y atacuñados
unos con otros en jaulas de cemento; denominadas en su origen como caseríos y
eventualmente bajo eufemismo de Residenciales públicos. David Sánchez es la
consecuencia de este desplazamiento (entrampamiento) social y de una cultura de
consumo donde el pobre aspira a ser rico y el rico quiere ser más rico. Es una
victima más de las circunstancias y el momento histórico que le tocó vivir a un
marginado más de Lirios del Sur. Les
dejo esta canción como muestra uno de los trabajos realizados por TEMPO desde
la cárcel hace poco tiempo. En la misma hace referencia a la clara división de
clases sociales que existe en Puerto Rico, a la marginación de los grupos
pertenecientes a los residenciales públicos y barriadas entre otros argumentos
poderosos que lo vuelven nuestra figura de la semana. Puede dejar sus
cometarios y escuchar otras canciones como “25 de septiembre” que también la
recomiendo…
Miguel Negroni
ANEXO
No hay comentarios.:
Publicar un comentario